lunes, 31 de mayo de 2010

Para mí es como...


"No existen más que dos reglas para escribir: tener algo que decir y decirlo."

Oscar Wilde

Escribir es esta imagen. Es esa sonrisa que te hace sentir mil cosas que quieres explicar y no sabes como. Escribir es... magia. Escribir son un mensaje subliminal tras otro. Escribir es salir de esa carcel llamada consciente para dar voz a los sentimientos y al subconsciente. Escribir es una redacción de la escuela contada con mucho tacto y haciendo que no sólo sea mucha tinta tonta. Escribir es contar una historia, escribir es dejar constancia de un hecho y que nadie pueda borrarlo.
Escribir es precioso, es la unión de corazón, muñeca y mente, para crear sentimientos en forma de arte...
Eso es para mí escribir.

viernes, 28 de mayo de 2010

"Esta es tu silla, ¿ves? Por favor, ven, siéntate. Ahora despliego el respaldo, reviso las ruedas, les paso un trapo húmedo para que tus manos sigan tan blancas como siempre. Blancas, no inocentes: a ti y a mí la inocencia no nos interesa demasiado. El color blanco sí, porque es fruto del esfuerzo. Hay que cuidarlo, mantenerlo limpio. Así que la preparo, como te prometí. La he preparado, ¿sabes?, durante meses, años, no me acuerdo bien. Eso me pasa con esta silla: me concentro tanto en ella que el calendario se pone a rodar y ya no sé qué fecha es, ni hace cuánto te espero. Sobre ella he depositado cartas, recuerdos, palabras, millones de sandeces que solamente un loco de atar sería capaz de entender. Creí que algún día llegarías a usarla. Me equivoqué, quién sabe. Aún ansío saber si desde algún lugar podrás oírme, o verme intentando construir cronómetros para volver atrás. Sigo asomándome al balcón cada mañana,por si, de refilón y queriendo sin querer encuentro tu mirada en alguna esquina. Sigo siendo el mismo necio de ayer, el amante de los barcos y las pasiones ocultas.
Aún quiero usar tu piel como cuaderno de bitácora, y que tus ojos sean el cataclismo que haga hundir a este viejo lobo de mar.
Mientras tanto, esperaré aquí, junto a tu silla, por si algún día quieres volver, para lanzarnos de nuevo al mar.
(Era un proyecto para presentar, pero se me han adelantado...)

sábado, 22 de mayo de 2010

Secretos, vicios y virtudes



Me encanta levantarme los sábados a las doce y media en punto de la mañana, me encanta que me den ataques de risa en clase y no pueda articular palabra. Me encanta bailar delante de mi espejo antes de entrar a la ducha, me encanta beberme la cocacola a sorbitos como si del mundo se tratase. Me encanta leer acerca de filósofos, me encanta escribir poesía. Me encanta salir a mi balcón a las doce y media de la noche y escuchar música. Odio.... definitivamente odio el ruido que hace la gente mientras come chicle, y odio también que me digan que algo me queda bién si no es así. Odio mi barriga de bebé, odio la gente superficial. Odio a aquél que en tu mejor día intenta quemar tu sornisa.
Pero, ¿ Sabes qué? Pese a todo esto, lo que más me gusta eres tú.

jueves, 13 de mayo de 2010

"Tempus fugit"


Segundo a segundo un pedazo más de la razón se va haciendo trizas al ritmo del compás de las agujas de un reloj, y cada gota que veo tras ese cristal que me encierra en esta clase es un motivo más para escapar. Cada lágrima del cielo que caía frente a mis ojos era una carga más para el fracaso que ya arrastaba desde tiempo atrás. El segundero de el reloj no me esperaba. Hablaba y me sentenciaba la vida. Me preguntaba qué me faltaba una vez tras otra a pesar de que mi única respuesta fuese "Nada". "El tiempo decidirá", me dijo... Maldito juez implacable, maldito veneno que ayer me daba aire y hoy me echa la soga al cuello. Maldigo al tiempo, maldigo a quién inventó el paso de los años y maldigo a quién maldijo mis ilusiones.
Al caer una gota frente a mí empecé a entenderlo todo. No se trata de huir de nosotros, sino del tiempo. Buscar la felicidad sin quedarnos sentados esperando a ver si aparece.
La gota huía, la gota entraba a un lugar deconocido, la gota se dejaba descubrir por alguien.
Aún así cayó al suelo, se transformó en moléculas y desapareció.
La minutera tocó su hora, y aquél frágil diamante se redujo a nada cuando por un momento sintió ser todo.
Yo quiero ser como esa gota... poder descubrir, sentir, y una vez que el tiempo no me preocupe, desaparecer. Sé que mi felicidad quedará escrita en alguien para siempre.
Un pequeño detalle de un segundo puede hacer historia en nuestro propio libro.

lunes, 10 de mayo de 2010

Confianza


Había un espacio que la dejaba ver su habitación. La llamaba a gritos. Se deslizó entre las maderas que diferenciaban el marco de madera de la puerta, y se plantó frente a él.
Se empezó a quitar la ropa lentamente y la fué dejando en su silla.
En un giro desesperado, cuando ya estaba desnuda preguntó:
-¿Te gusta lo que ves?
Él, sin apenas mover su cabeza desvió su mirada hacia la silla. La obserbava maravillado, parecía que estuviese cazando mariposas con sus pupilas sobre cada detalle.
Inquieta, ella se abalanzó sobre él y le besó apasionadamente. Él, de pronto dijo:
-Levántate y vístete.
Ells obedeció. Cogió las piezas de ropa una por una y se las puso. Lo miró fijamente a los ojos y él le susurró:
-Ahora, desnúdate de nuevo y deposita tus prendas en el mismo lugar. La silla me acaba de contar que se ha enamorado del miedo...

miércoles, 5 de mayo de 2010










"En boca cerrada no entran moscas"
Entonces cuéntame,
¿Qué pasaría si tu silencio hablase?

lunes, 3 de mayo de 2010

Coge una gran bocanada de aire. Sí, inténtalo. No puedes. Las lágrimas te ahogan. Ya escuchaste muchas palabras desconsolantes, ya te repitieron seguidas veces que eras inútil, que no te salía nada bién y que ... y ¿que qué?
Al fin y al cabo ya solo te queda rendirte...
Es curioso darse cuenta de que el colofón de nuestro dolor son llantos del pasado. Cicatrices en lo más hondo del alma que tapamos, pero a pesar de nadie saberlo siguen estando ahí. Pero qué más da. Imagino que serán alimento de tu olvido todas las promesas que me hiciste. O, ¿ A caso recuerdas que soy yo la última pincelada en tu más preciosa obra, la última frase de tu mejor libro?
A decir verdad, me hubiese conformado con saber que recordabas el
"Je t'aime toujours, princesse".