lunes, 21 de junio de 2010

Un placer compartir papel con usted...

-Dame boli y papel que moveré el mundo sin necesidad de golpes. La tinta es mi arte y las palabras mi necesidad, mis delirios son una pequeña parte de tu cordura. Con mis manos yo escribo lo que tú jamás te atreviste a dibujar con la mirada. Por eso pido papel, dime la posible cura de mi soledad, lo peor de la humanidad, que la cogeré al vuelo y voy a dibujarla con la mirada para que tú la escribas y no tendré miedo de alzar el vuelo y contarle al mundo que estoy dispuesta a hacer y a deshacer hasta que de una vez por todas tu oídos puedan escucharme.
-¿Mis oídos? el mundo entero debería escucharte. Álzate, vuela, cuéntale a las nubes tus sueños, que por ser tú te los van a conceder.
-Con solo una de tus alas, hasta el más necio podría volar alto. Hasta el más triste sabría sonreír, y hasta una guitarra sin cuerdas sonaría bién. La magnificencia y la grandeza se mide por pequeños instantes y actos. Guarda tu querido tedio, te hará crear cosas maravillosas. Haz sonar una nota, escribe una palabra, dibuja un cielo, una sonrisa, una mirada en la mayor oscuridad jamás creada, allí estarás tu y tus manos para hacer de algo arte, de cualquier palabra viento o mar, para que el viento lo ame sin cesar.
-¿Sabes? Tan sólo con éstas cuatro palabras, y un par de sonrisas podríamos cambiar el mundo, podríamos hacer historia...y una vez siendo ya antepasados, siendo observados y estudiados. Nuestras palabras entre cojines, protegidos en los mejores museos... pero ahora toca escribir y dibujar arte.
-¿Tu vas a rendirte? Porque creo que podemos ser capaces de tocar el cielo sin necesidad de escaleras...sin necesidad de nubes...sin necesidad de nada.
-¿No podemos ser palabras?
-No hay suficientes para describirte
-No hay que buscar, cada uno tiene su palabra y su viento. Tú tienes unas, yo otras de otro color. Pero me tendrás que ayudar, ningun mar, ningun sol, ninguna noche, ninguna copa, ningun humo de ningun cigarro, ninguna lámpara, nada, nada me ha dado ninguna palabra que sea de tu talla, todas se te quedan cortas... dime si siendo nada ¿no podemos escribirlo todo? Escribiendo, solo con palabras, puedes ser lo que tu quieras. Puedes contar mil historias, puedes hablar de blanco cuando es un mensaje subliminal gris. Puedes... tienes la capacidad de hacer bello el mas horrible sentimiento. Haces florecer flores en cualquier cuadro gris, sin miedo de nada, sin miedo de nadie, con el ñunico pretexto de poder hacer sentir. De que alguien por un momento sea un pequeño pedazo de tí.
- Cierro ya la ventana a los sueños, las noches, el arte y las bellas palabras. Cierro los miedos, los cuadros, las novelas y los puntos. Cierro la nada dentro de todo. Es un honor escribir historia, es un honor lanzar palabras al viento des del mar, más honor es saber que tus sabias palabras preceden mis puntos y finales... No te asustes, habrá más finales. Acabo. Termino. Cierro. Aquí dejo mi papel del principio lleno de garabotes, palabras y colores. Aquí dejo mi boli gastado, sin tinta, sin arte ni necesidad, sin uso ni disfraz. Aqui dejo la noche, y mi despertad. Que tus sueños vuelen con la noche...



Jordi Pla Gené i Ane Santiago Quintas.

domingo, 20 de junio de 2010


Hundo la mano en la arena mientras tansolo la oscuridad de la noche y alguna que otra luz artificial de fondo me acompañan. Es curioso, veo que la vida se me escapa como aquellos granos de arena. Entre las manos, por pequeños espacios y absurdos silencios. Algun ángel me escucha llorar en silencio y se une a mi llanto.
La lluvia ahora también es mi compañera.
Ahora mismo escribiría mil canciones. Mil letras desesperadas hablando acerca de esas gotas que con solo mojar duelen. Esos pequeños cristales, que al recoger los restos de las vasijas rotaspor el silencio y la soledad, se te clavan en la piel y no te dejan seguir palpando tus sueños.
Hablo por hablar, escribo por expulsar esos cristales y por puro placer. Y, mientras hablo, escribo y siento sigo aquí, sentada en la misma playa viendo como la lluvia destuye todos los castillos de arena que un día imaginé.
La posibilidad de soñar y hacer realidad un sueño, es la que hace que la vida tenga algo más de sentido, o que lo pierda de golpe al ser destruido.

miércoles, 16 de junio de 2010

Esta vez nigún duende me ha susurrado en el oído que escriba, ni tampoco tengo ganas de hablar acerca de lo que me cuentan mis lágrimas.
Sencillamente es ese escalofrío de cuando sabes que las cosas no van como tú quisieras. Que la rabia te corroe por dentro. No por nada, ni por todo. Por detalles, por excesos de sentimientos por un lado o por otro.
Estás hasta los cojones. Brusca y basta expresión pero al fin y al cabo es clara. Ha sonado el despertador, los pasajeros han subido al tren, ha subido el telón y debe empezar el espectáculo. Mientrastanto tú huyes. No tú físicamente, sino sencillamente tu moral.
No odias el mundo, tansolo necesitas escapar de la realidad. Necesitas romper esas cadenas que te abrazan cuál frío en el más terrible invierno y no te dejan salir de tu propia cárcel. Encontrar nuevas melodías encantadas que te eleven. Nuevas cuerdas para tu atrotinada guitarra desafinada que quiere volver a escribir canciones en el viento.
Quieres descubrir una nueva fuente de la que beber, otra fruta de la pasión que morder.
Poder dar un giro de ciento ochenta grados.
Que caiga la mentira, permanezca la verdad, y atrapes al vuelo algún que otro nuevo sueño, para que de un momento a otro pierdas en él el equilibrio de nuevo, y ese maldito reloj de arena vuelva a girar para que caigas...

jueves, 10 de junio de 2010

Empieza algo

Seguramete habrás entrado aquí para pasar el rato. Por curiosidad, sí. No te cortes, puedes seguir leyendo. Ahora mismo estás empezando a leer una historia. Es mágico. No sabes la palabra que seguirá a la siguiente, ni a la otra. No sabes lo que te espera en el siguiente párrafo. Y, probablemente, si te gusta, seguirás intrigado hasta conocer el final.
¿No es fascinante? Empezar algo. La ilusión, el brillo de los ojos.
Ese escalofrío recorriendo tu cuerpo que te dice que vas a sentir algo nuevo. El segundo en que te quedas sin respiración. Esos son los momentos por los cuales vale la pena vivir.
El instante en que todo tu ser se llena de euforia y quisieras parar el tiempo para siempre con tansolo el objetivo de que esa sensación no cesase, de que la chispa de esa décima de segundo invadiese tu cuerpo para siempre.
Se llama ilusión. No podemos dejar caer la vida en la montonía.
Es por eso que jamás dejo de escribir. Porque sé que detrás de cada una de estas palabras habrá una persona que empiece. Que empiece a soñar, que empiece a escribir, que empiece a sentir un escalofrío por el cuerpo. Que sienta esa fascinación, ese encantamiento que lo envuelva en ilusiones de colores, solo por el hecho de poder empezar algo.
Ahora dime, ¿A qué esperas para renacer?
No dejéis que un segundo se repita dos veces, disfrutadlo al máximo, y buscad detrás de cada esquina un beso, una persona, algo que de nuevo, os robe el aire un segundo y a cambio os regale la vida...